Cuando los chicos acaban en la cafetería de la escuela, se encuentran con la preciosa y trabajadora Kayo con su pañuelo y su delantal. Como hace mucho frío para salir fuera, los chicos deciden comer dentro, pero Yuuki no parece muy contento con ello. Estaba acumulando pegatinas de las bolsas de pan y esperaba poder canjearlas por un plato. Poco después, Yuuki ve a Kayo comiendo pan durante el descanso. Yuuki entonces descubre que ambos están coleccionando las mismas pegatinas, lo que lleva a una extraña relación entre los dos.